Los nacionalismos secesionistas antimonárquicos en el Gran Teatro del Liceo.

Por España, en un proceso de desmembración de su identidad y unidad histórica, los nacionalismos secesionistas hace tiempo que decidieron menospreciar y odiar a los símbolos históricos y a las instituciones seculares.

Los pitidos, abucheos e insultos, así como las injurias y la quema de las imágenes fotográficas de Rey Juan Carlos I y de la Reina Sofía de Grecia en actos públicos o en medios de comunicación pronacionalistas, y a los Príncipes de Asturias, Sus Altezas Reales el Príncipe Don Felipe de Borbón y Grecia, y a su esposa la Princesa Leticia Ortiz, son una muestra del desprecio y odio hacia la Monarquía Española, otra más de tantas y tantas llevadas a cabo por los nacionalismos independentistas de izquierda y de derecha, sea el vasco-etarra o el catalanista, sin que hayan sido penalizados ni sancionados en su justa medida por la ley o en las urnas.

Una vez más, otro desprecio a la secular Monarquía católica española representada por Sus Altezas Reales los Príncipes, ha tenido su escenificación en Cataluña, primero en la calle, por parte de los antimonárquicos, antiespañolistas y anticonstitucionalistas, y luego en un lugar histórico de la cultura española y catalana, El Gran Teatro del Liceo, donde fueron invitados a la representación de una ópera del Siglo XIX, el siglo del Romanticismo, del liberalismo y de los nacionalismos, la ópera bufa del italiano Gaetano Donizetti(1797-1848) L´elisir d´amore(Milán, 1832, y en Barcelona, 1832 y 2013). En el Liceo estaban acompañados por relevantes personalidades políticas, sociales, culturales y empresariales de España y Cataluña. Entre ellos, la burguesía catalanista e independentista.

El Gran Teatro del Liceo tiene una relación muy directa con la Monarquía Española, porque ella es la que inicia la tradición operística en Cataluña y España, con la llegada a Barcelona del Archiduque Carlos de Austria (1685-1740), donde establece su corte durante la Guerra de Sucesión por el Trono de España (1702-1711) que le enfrentó con Felipe V(1683-1746) de Borbón, quien sería reconocido como Rey de España por las nuevas potencias europeas, como Inglaterra, en el Tratado de la Paz de Utrecht (1713), que suponía el fin del dominio en Europa del Imperio Español de los Habsburgos españoles. La primera ópera que se va representar será la serenata alegórica basada en el libreto de un poeta italiano, Il più bel nome(1708)del compositor también italiano Antonio Caldara(1670-1736), con motivo del enlace del Archiduque con Isabel Cristina de Brunswick-Wolfenbüttel.

Aunque se inauguró en 1847, el Liceo surge en 1837[1] de la mano de la Sociedad Dramática de Aficionados, que adquiere el Convento de Montsió, a partir del cual nacería el Liceo Filarmónico Dramático Barcelonés de S.M. Isabel II (1830-1904), la más tarde destronaday exiliada Reina de los revueltos tiempos de la Revolución Liberal en España, y gran amante de la ópera. La finalidad de Liceo era la promoción, tanto dela enseñanza musical como la organización de representaciones de teatro y ópera. El Liceo fue inaugurado por la Familia Real.

Recordemos que en 1893, dentro del Gran Teatro del Liceo, cuando se representaba la ópera histórica Guillermo Tell de Gioacchino AntonioRossini(1792-1868), con el teatro repleto por la gran burguesía industrial catalana, el anarquista aragonés Santiago Salvador Franch(1862-1894) se introdujo dentro y lanzó dos bombas, de las cuales sólo estalló una que provocó varios muertos y mutilados. Este fue un atentado terrorista inspirado en el anarquismo socialista del ruso Bakunin, Mihail Alexandrovich (1814-1876), representante del anarquismo ateo, antiburgués, antiestatalista y antimonárquico.

Por fortuna, esta vez en el Liceo, no se ha llegado al terrorismo directo, ni contra Sus Altezas Reales los Príncipes de España, ni contra la alta burguesía catalana, ni contra los representantes políticos, culturales y empresariales. Pero sí que se ha atentado groseramente contra lo que simboliza la Institución de la Monarquía, una de nuestras principales identidades históricas que el nacionalismo secesionista viene dinamitando durante los más de treinta años de demolición nacionalista secesionista de la Constitución Española de 1978. Procede de lejos este desprecio, de antes y desde los orígenes de la actual democracia.

Antes, en 1974, el nacionalismo independentista vasco-etarra, intentó secuestrar al Rey Juan Carlos I en Montecarlo, cuando todavía era Príncipe de España.

Luego, en 1981, en el mismo mes de febrero, pocos días antes del fracasado Golpe de Estado del 23-F(en buena medida neutralizado por la intervención del Rey como Jefe del Estado y de las Fuerzas Armadas): Cuandoel Rey Juan Carlos se disponía a dar su discurso en el podio de los oradores de la Casa de Juntas de Guernika, los parlamentarios y junteros nacionalistas secesionistas del terrorismo socialista marxista-leninista vasco-etarra de Herri Batasuna(HB),lo boicotearon con gritos, abucheos, silbidos, protestas, y con el puño socialista-comunista en alto a la vez que cantaban el himno nacionalista "Eusko gudariak". Sin embargo, los demás representantes vascos del Parlamento y de las Juntas, salvo el silencio cómplice de la otra extrema izquierda secesionista, EuskadikoEzquerra (EE), pronto neutralizaron la antidemocrática actuación de los parlamentarios y junteros de Herri Batasuna, con aplausos, vivas al Rey y gritos de "¡Fuera, fuera!", y con laposterior expulsión de la Casa de Juntas de los batasuneros.

Años más tarde, en 1995 el odio irredento del nacionalismo independentista vasco-etarra, preparaba un atentado terrorista contra el Rey en Palma de Mallorca, que fue evitado por las fuerzas policiales con la detención de los terroristas vascos.

Los intentos frustrados y neutralizados del secuestro en 1974 y del magnicidio del Rey Juan Carlos I en 1995, y el incidente en febrero de 1981 en la Casa de Juntas de Guernika, como el incidente ocurrido contra los Príncipes de Asturias en mayo de 2013 en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona, han sido preparados por los nacionalistas separatistas de la izquierda vasco-etarra para boicotear y aniquilar la presencia de la Monarquía en Vascongadas, y por los nacionalismos independentistas de la izquierda y la derecha conservadora catalanista, para boicotear y desprestigiar en Cataluña a Sus Altezas Reales los Príncipes de España, a la Monarquía Española.

Como indica el Art. 1. 3 de la Constitución Española (1978)[2]:

La forma política del Estado Español es la Monarquía Parlamentaria.

Además, el Rey representa a la Nación tanto dentro como fuera de España. En el Art. 56.1 se indica:

El Rey es el Jefe del Estado, símbolo de su unidad y permanencia, arbitra y modera el funcionamiento regular de las instituciones, asume la más alta representación del Estado español en las relaciones internacionales, especialmente con las naciones de su comunidad histórica, y ejerce las funciones que le atribuyen expresamente la Constitución y las leyes.

En las Comunidades Autónomas, la Corona es reconocida, y ella, en respuesta al reconocimiento social y político del Pueblo Español, suele agradecerlo otorgando a diversas personalidades títulos nobiliarios, muchos de ellos han caído en catalanes de conocido prestigio dentro y fuera de España y Cataluña.

El Rey Juan Carlos I, desde su Coronaciónen 1975, si exceptuamos los títulos vitalicios otorgados a los miembros de la familia real, que no son hereditarios, ha concedido títulos nobiliarios, a científicos, artistas, nobles, políticos, empresarios y deportistas, entre ellos a catalanes como:

En 1982: Marqués de Dalí de Púbol, al magistral pintor del Surrealismo, Salvador Dalí Domenech.

En 1986: Marqués de Tarradellas, a José Tarradellas Joan, expresidente de la Generalitat de Cataluña.

En 1991: Marqués de Samaranch, a Juan Antonio Samaranch Torelló, empresario y político, Delegado Nacional de Educación Física y Deportes(1967) con la Dictadura Franquista, Embajador de España en la Unión Soviética y Mongolia, y Presidente del Comité Olímpico Internacional (C.O.I.).

En 2003: Marqués de Oró, a Juan Oró Florensa, científico e investigador bioquímico.

En 2005: Grandeza de España, para unir al título de Conde de Casa Dávalos, a Martínde Riquer y Morera, filólogo y académico de la Real Academia Española (R.A.E.).

 En  2008: Grandeza de España, para unir al título de Conde de Godó otorgado en 1916 por elRey Alfonso XIII (1886-1941) a Ramón Godó y Lallana, a Javier de Godó y Muntañola, editor de "La Vanguardia".

Y en 2010: Marqués de Tàpies, a Antoni Tàpies i Puig, pintor, escultor y teórico del Arte, el máximo exponente mundial del informalismo artístico. Y como Baronesa de Perpinyà, a Roser Rahola i d'Espona, viuda del historiador Jaume Vicens Vives.

Después de lo dicho, en Cataluña, el nacionalismo independentista del Siglo XIX, en este Siglo XXI sigue siendo un anacronismo sin sentido ni razón histórica en Europa y España, pues, nunca ha reconocido en la Historia de España y del Reino de Aragón, al que pertenecía el Principado de Cataluña, los lazos histórico-culturales indisolubles que unen a Cataluña con la Monarquía Española, con España.

[1] Gran Teatre del Liceu, Historia, en www.liceubarcelona.cat /es/el-liceu/la-institucion/historia.htlm

[2] Constitución Española de 1978, en www.lamoncloa.gob.es