Arturo Pérez-Reverte se quejaba en su sección "Patente de corso" de la revista XL Semanal que este es un país "donde todo disparate tiene su asiento y cada tonto su momento". Y todo porque hay personas e instituciones que han decidido hacer caso omiso de las recomendaciones de la Real Academia de la Lengua y utilizan los géneros masculino y femenino a la hora de expresarse de forma oral y escrita.
El académico Pérez-Reverte muestra en su artículo un texto oficial de la Consejería de Educación de la Región de Murcia donde, de forma reiterada, aparecen las palabras catedráticos/catedráticas, españoles/españolas, candidatos/candidatas… ¿Creerán los funcionarios murcianos que con esa reiteración demuestran que son los más progresistas del mundo mundial? ¿Será ésta una prueba de la necesidad de reciclarse que muchos políticos tienen? Y es que olvidan de forma consciente, o no, que a la hora de expresarse el género masculino es un género no marcado y válido para denominar a mujeres y hombres.
Pues el académico Pérez-Reverte ha de saber que el maestro Marzá, consejero de Educación de la Comunidad Valenciana, ha decidido que en todos los colegios públicos y concertados exista la figura del Coordinador de Igualdad y Convivencia para fomentar, entre otras cosas, el uso del lenguaje inclusivo de género. Profesores y profesoras, padres y madres y alumnos y alumnas, personal/personala no docente/docenta y todo miembro/miembra de la comunidad educativa recibirán las advertencias, correcciones e instrucciones de este nuevo coordinador para que a la hora de hablar o de escribir no olviden hacer caso omiso de las advertencias de la Real Academia y demuestren su progresía incondicional.
Más aún, pues se revisarán todos los documentos escolares ya escritos para adecuarlos al nuevo uso progresista del lenguaje. Esto es lo que hay y ya veremos lo que vendrá. Pero que nadie se queje ni abra la boca, pues si no hacen caso ni a los miembros de la Academia, aún menos a los ciudadanos de a pie. ¿No creen?