El programa de algunos partidos políticos es bien sencillo y se resume en un solo punto: Hay que echar al Partido Popular de todas las alcaldías y gobiernos autonómicos. En cambio, es más que larga la lista de agravios y desaires que, según la oposición, justifican del todo ese único punto de su programa electoral. Y entre esas quejas está una que se ha hecho voz a través del candidato socialista a la presidencia de la Comunidad Valenciana, el señor Ximo Puig: No es posible que los colegios que "segregan por sexos" reciban subvención alguna.
Y uno, que es maestro y que ha trabajado en todo tipo de colegios, insta al señor Puig para que, si de verdad se cree que en los colegios de enseñanza diferenciada se discrimina, presente una denuncia en el juzgado y no hable ya sólo de quitar el concierto económico a esos colegios, sino de cerrarlos a cal y canto. No es creíble que unas acusaciones tan graves caigan en el olvido a cambio de un simple puñado de euros. ¿Sabe una cosa, señor Puig? Creo que usted nunca ha visitado un colegio de educación diferenciada, ni jamás ha hablado con sus profesores, con los alumnos y con sus familias. Todos ellos han elegido este tipo de enseñanza plenamente conscientes y con entera libertad. Sí, una libertad educativa que ustedes desean amordazar… Qué triste, ¿verdad?