Portada
Vaticano
Realidades Eclesiales
Iglesia en España
Iglesia en América
Iglesia resto del mundo
Cultura
Sociedad

·Homilia Dominical
·Hablan los Obispos
·Fe y Razón
·Reflexion en libertad
·Colaboraciones



 
 

 

 

 

 
Apr 2024
MoTuWeThFrSaSu
1 2 3 4 5 6 7
8 9 10 11 12 13 14
15 16 17 18 19 20 21
22 23 24 25 26 27 28
29 30          

   


www
Portada:: Homilia:: Ciclo B:: V Domingo de Cuaresma: Él, a pesar de ser Hijo, aprendió, sufriendo, a obedecer





V Domingo de Cuaresma: Él, a pesar de ser Hijo, aprendió, sufriendo, a obedecer

Sat, 21 Mar 2015 22:18:00
 

CAMINEO.INFO.-

JEREMÍAS 31, 31-34
SALMO 50
HEBREOS
5, 7-9
JUAN 12, 20-33


Seguimos el dinamismo litúrgico de la semana pasada, donde todo nos lleva a centrar nuestra mirada en el misterio pascual que se acerca.

Si en un icono tuviéramos que resumir el misterio salvador de Jesucristo, en éste tendría que salir el misterio pascual. Esto es, su pasión, muerte y resurrección.

El evangelio de hoy nos lleva a dirigir nuestra mirada hacia el crucificado. Tres ideas:

Qué expresión más bonita, la que dicen los griegos al apóstol Felipe: “ ..quisiéramos ver a Jesús”. Constantemente, escucho este grito. Sí, constantemente. No lo escucho físicamente, claro, pero sí, metafóricamente. Cuando los jóvenes al ir de fiesta necesitan el alcohol para pasarlo bien. ¿No están diciendo? “Quisiéramos ver a Jesús”. Cuando en el matrimonio, ya no hay aquel deseo vivo de buscar el bien del otro ¿no están diciendo? “Quisiéramos ver a Jesús”. Cuando los abuelos están quejosos, centrados en lo negativo, cuando se han olvidado de reír. ¿No están diciendo? “Quisiéramos ver a Jesús”.
Constantemente, siento este grito. Cuando has descubierto a Jesús como un amigo extraordinario, como una fuente de donde mana una vida más auténtica, como aquel que cura innumerables males. Entonces, escuchas este grito al contemplar la realidad.

Afinemos los oídos y no nos cortemos ni un pelo, a la hora de decir y de proponer; “lo que tú necesitas es que Jesús entre en tu vida”.

Cuando dicen a Jesús que los griegos, lo quieren ver, su respuesta apunta hacia la Pascua. Como diciendo; “que ahora me vean y me escuchen poco haremos... Será después, en el misterio Pascual, donde el misterio de mi vida quedará aclarado y de allí manará la salvación para toda la Humanidad”. Esto enlaza con lo que dice hacia el final del evangelio de hoy: “Y cuando yo sea elevado sobre la tierra atraeré a todos hacia mí”.

Jesús nos vuelve a marcar un camino. A estos que gritan, sin saberlo y sin voz, “quisiéramos ver a Jesús”, dirijámoslos hacia la pascua de Jesús. “Mira el crucificado, descubre que Jesús te ama, Jesús ha muerto por ti y Jesús te salva.”
Segunda idea. Muy oportunamente, hoy, la liturgia nos lleva a meditar y contemplar, un texto del evangelio de Juan, que nos permite entrar en el corazón de Jesús, que nos lleva a poder compartir su estado de ánimo antes de la pasión. No como espectadores, sino como discípulos suyos, que en estos días estamos llamados a seguirlo, a seguir sus huellas, a sufrir con Él, para poder resucitar con Él.

¡¡No seamos espectadores!! En nuestra oración personal, recemos el Vía Crucis, resigamos los textos de la pasión. No como espectadores, sino como discípulos suyos.

Dice Jesús: “Ahora mi alma está agitada, y ¿qué diré?: Padre, líbrame de esta hora. Pero si por esto he venido, para esta hora. Padre, glorifica tu nombre”. Palabras que son como una anticipación de la oración de Getsemaní. Jesús siente el peso de la prueba, y le amarga la tristeza por el trágico final que se acerca, pero se adhiere al plan del Padre. El papa Benedicto XVI, dice que “Padre, glorifica tu nombre” quiere decir “Padre acepto la cruz”.

No olvidemos nunca esta gran lección de Jesús, de manera que nuestra voluntad egoísta se transforme en la voluntad divina, adherirnos al plan del Padre.

Tercera idea: Hoy hemos contemplado a dos mediadores; Felipe y Andrés. Mediadores entre los griegos y Jesús. Necesitamos mediadores. La religión necesita mediadores. Cuando oigo discursos que dicen que para acceder a Dios no hacen falta mediadores, poco menos que alucino.

Sin mediadores todo el camino que hacemos, por muy espiritual que sea, empieza y acaba en nosotros.

Cuántas veces hemos oído y hemos leído, especialmente, en La Contra de La Vanguardia, “espiritualidad sí, religión no”. O discursos del estilo: “La religión es para los que quieren evitar ir al infierno. La espiritualidad es para los que quieren alcanzar la Ascensión Espiritual. La religión es para los adormecidos. La espiritualidad es para los despiertos. La religión es para aquellos que necesitan que otro les diga qué hacer. La espiritualidad es para los que escuchan su voz interior...” Bla, bla, bla... El mismo gnosticismo de siempre.

Ni mediadores, ni mediaciones, ni ningún precepto, ni ninguna obediencia, ni ninguna tradición... sólo gurús auto promocionados... ¿Qué queréis que os diga? A mí, todo esto me hace un tufo a narcisismo espiritual que me desconcierta.

Me atrevo a hacer un pronóstico: volveremos a la religión, porque habremos entendido que la religión católica, a pesar de sus miserias, es uno de los mejores mediadores para introducirnos en el círculo íntimo del Señor, donde se le puede escuchar, amar y seguir sin grandes alucinaciones espirituales. Dios dirá.









Nombre:
Email:
Titulo:
Comentario:




SI QUIERES COLABORAR CON CAMINEO.INFO PULSA DONAR

Preview Chanel Preview Chanel
Camineo.info 2004-2015

PHPCow news publishing script, content management system Review www.camineo.info on alexa.com