Sigo con agrado sus espacios televisivos en Antena 3; recetas fáciles, bien explicadas, digna de una buena mesa. Algún que otro chiste a veces de mal gusto del calado entre la ejecución de las recetas, pero el día 27 de octubre en el que usted nos deleitaba con sus popietas de lenguado se permitió hacer chistes sobre sacerdotes de la Iglesia católica y no solo eso que ya es bastante, sino que ironizó ampliamente sobre el sacramento de la confesión.
Burlarse de cualquier religión es falta de sentido común, de sensibilidad y de prudencia, ahora usted ha cogido el todo por la parte y ha aprovechado un espacio público para difundir su pensamiento, en todos sitios hay manzanas podridas, lo cual no quiere decir que el manzano las produzca así.