La rehabilitación interior de la iglesia de la Divina Pastora ha
permitido descubrir unas valiosas pinturas murales barrocas del siglo
XVIII que decoran gran parte del templo y que lo convierten en un
ejemplo único en su género de los edificios religiosos y civiles de
Málaga. El obispo de la diócesis, Jesús Catalá, y el alcalde de Málaga,
Francisco de la Torre, visitaron ayer la iglesia del barrio de
Capuchinos y comprobaron que las obras de restauración están muy
avanzadas. El modo en que se han llevado a cabo los trabajos y la
historia del edificio lo explicó el director técnico de la actuación,
Pablo Pastor. La inversión en las obras ha sido de 279.425 euros, de los
que el Ayuntamiento ha puesto 259.901 euros y el Obispado, 19.523
euros. Se prevé que el templo se reabra al culto el próximo mes de mayo.
En el descubrimiento de las pinturas murales han jugado un papel
muy importante la restauradora Gloria Pérez Fernández y su equipo de
colaboradores, que han sacado a la luz la decoración de dos bóvedas de
la nave lateral norte formadas por ángeles y motivos vegetales sobre
fondo de color rojizo, en el caso de la capilla que ocupa la Cofradía
del Prendimiento, y por una representación de la escena del carro de
fuego de San Francisco de Asís en el tramo de la nave adyacente, que con
casi toda seguridad perteneció a la Venerable Orden Tercera de San
Francisco de Asís. Asimismo, sobresalen las pinturas murales aparecidas
en los muros y en el techo de la nave central de la iglesia.
Las obras de reparación del interior del templo empezaron en
julio de 2017. El edificio se encontraba afectado fundamentalmente por
el mal estado que presentaba la solería y los revestimientos debido a la
humedad y a la carencia de una base firme de sustentación de sus
suelos. Los trabajos, realizados por Edificaciones Castelló, han
consistido en la renovación de todo el pavimento, tanto de la iglesia
como de algunas de sus dependencias anexas (la sacristía y el pasillo
que la recorre lateralmente). En el templo se ha aplicado un nuevo
pavimento de mármol en tonos blanco y rojo y se han reparado todos los
camarines de la nave lateral situada junto al convento de las monjas
clarisas. En uno de ellos se han abierto las ventanas laterales
originales que daban luz natural a las imágenes contenidas en esos
espacios.
También se ha renovado la instalación eléctrica y de megafonía.
Igualmente, se ha aplicado un nuevo revestimiento de revoco de cal en
los paramentos de la sacristía y el claustro lateral, en el que se ha
colocado un suelo a base de ladrillo cerámico con espigas, muy similar
al que existía originalmente en la iglesia y en sus claustros
adyacentes. Asimismo, el pozo de uno de estos claustros, convertido hoy
en patio, ha recuperado su primitiva disposición.
Colaboración institucional
El obispo de Málaga destacó que las cosas salen mejor cuando hay
colaboración entre las instituciones y agradeció el trabajo efectuado
por el Ayuntamiento en la restauración de la iglesia, por lo que se ha
podido rehabilitar y recuperar un patrimonio muy importante. Catalá
calificó de «optima y de magnífica» la labor y recordó que el arreglo
del edificio religioso comenzó hace diez años y ahora, tras distintas
fases, se está en la etapa final. El importe de la restauración integral
de las distintas fases asciende a unos 900.000 euros. El prelado se
refirió «a la preciosidad de las pinturas murales» y felicitó a los
técnicos que han llevado a cabo el trabajo.
Por su parte, el alcalde precisó que es muy positiva y muy
favorable la recuperación de la iglesia de la Divina Pastora para la
ciudad. «Estamos encantados de colaborar una vez más con la Iglesia de
Málaga. Sumamos esfuerzos para llegar lejos», indicó el regidor, que
ensalzó la recuperación de unas pinturas murales barrocas, que «son un
ejemplo único en una iglesia malagueña y que tienen un gran valor
histórico y artístico». Francisco de la Torre subrayó: «Estamos muy
contentos, muy orgullosos. Este templo es historia y patrimonio de
Málaga y del barrio de Capuchinos».
Además del obispo y del alcalde, visitaron la iglesia varios
concejales, entre los que estuvo el portavoz del grupo socialista en el
Ayuntamiento de Málaga, Daniel Pérez, y el edil de Ordenación del
Territorio, Francisco Pomares, así como el párroco de la Pastora,
Alfredo López, hermanos mayores de cofradías de Capuchinos y miembros de
la parroquia, entre otras personas.