Durante los últimos años se ha difundido en el habla común el término resiliencia, que se emplea con diversos matices en el campo de la ingeniería, la traumatología, la biología, la psicología o la neurociencia. Según la Real Academia es la " capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas".
Las ocho historias que recojo en este libro - 8 historias sin vergüenza. ¿Resiliencia o don?- son ejemplos claros de la resiliencia de unos hombres y mujeres que han superado muchas situaciones límite tras bajar a los sótanos de la existencia: criminalidad, droga, cleptomanía, satanismo, intento de suicidio, prostitución, etc.
Lo excepcional en este caso es que no sólo han superado esas situaciones, sino que se han convertido en personas con una gran influencia humana y espiritual en su entorno. Kestutis Dvareckas, por ejemplo, es un sacerdote lituano que lleva a cabo una fecunda labor espiritual en Lituania; Tim Guernard desarrolla una profunda tarea humanitaria y apostólica en Francia; Julitza ha acercado a muchas personas a la fe en una ciudad como Oslo, donde el catolicismo es minoritario. Fran y Eva son una familia en misión en Dinamarca que trabaja por la evangelización de ese país escandinavo.
Sus historias eran desconocidas por el gran público, salvo la de Tim Guenard, que contó su vida en su autobiografía, titulada Mas fuerte que el odio (Gedisa, 2009).
Cuando les escuchaba me preguntaba hasta qué punto su cambio vital fue consecuencia de su resiliencia humana, de su capacidad de aguante interior , o fruto de la gracia. No he resuelto esa interrogante; y lo traslado al lector: ¿resiliencia o don?
Para los ocho testimoniantes, sin embargo, la respuesta es clara: su cambio interior y exterior fue, sobre todo, un don de Dios que les llegó, con frecuencia, cuando se encontraban al límite de sus fuerzas y casi en manos de la desesperación.
"¿Por qué deseas contar tusexperiencias?" -les preguntaba. Y la respuesta fue unánime: en todos los casos querían mostrar como la misericordia de Dios actuó en sus vidas, cuando parecían "gente sin remedio", con adicciones de las que no lograban liberarse. Por esa razón estos ocho testimonios constituyen, en cierto sentido, una oración de acción de gracias.
Los perfiles y edades de estos hombres y mujeres son muy diversos. Crack rondaba los treinta cuando le condenaron a varias décadas de prisión en una de las cárceles más peligrosas de África. No doy su nombre en el libro por seguridad, ya que la banda criminal que le llevó a la cárcel no dudaría en matarle si le localizara.
Otros, como Fran y Eva, eran muy jóvenes. Tenían quince años: una edad en la que se suele decidir, con bastante frecuencia, la dirección de la propia vida. Y la que dirección que habían tomado -droga, robos, etc.- no era la mejor: jugaban, como tantos adolescentes, sin darse demasiada cuenta, al borde del precipicio.
Su testimonio puede sorprender en este conjunto de historias fuertes. En el caso de Fran y Eva sólo se trataba de unos inicios, de la confusión de tantísimos adolescentes de nuestro tiempo, mientras que el resto de las historias, cuentan, por decirlo de alguna manera, "con un largo recorrido".
A pesar de todo, he decidido incluirlas en el libro no sólo porque sus historias sean posiblemente, la más cercana, y relate problemas que suceden en el seno de tantas familias y tantas familias, sino porque me impresionó especialmente por la clarividencia y la fe de sus padres.
Conchi aporta una perspectiva sobre el mundo de la prostitución que invita a la reflexión. En otros testimonios se ponen de manifiesto las consecuencias de la ausencia del padre o de la madre, aunque estén "presentes" de un modo formal en el hogar: Kestutis Dvareckas habla del terrible proceso íntimo que le llevó al borde del suicidio.Juan Havana, un conocido rapero sueco, recuerda como se introdujo en la delincuencia por medio de un gánster amigo suyo; hasta que ese amigo le dio una sorpresa que no esperaba.
Tim Guénard es, sin duda, el caso más extremo: fue abandonado por su madre; maltratado por su padre hasta acabar en un hospital en el que estuvo varios años, sin que nadie le visitara; internado en un reformatorio; violado en la adolescencia... Trabajó como gigoló en París y decidió hacerse boxeador para vengarse de su padre, hasta que su vida dio un giro sorprendente.
Comencé a recoger estos testimonios hace más de tres años, en los comienzos del pontificado del Papa Francisco. No imaginaba que saldrían a la luz en las primeras semanas del Año de la Misericordia. Son historias de resiliencia, desde luego; pero sobre todo de misericordia.
La misericordia divina -conviene resaltarlo- es un don que cada uno acoge libremente, sea cual sea su circunstancia. Algunas de estas personas sufrieron carencias familiares, educativas y formativas, como Juan Havana, Kestutis, Anisa o Tim Guénard; otros, por el contrario, disfrutaron de una profunda formación cristiana y del apoyo de unos padres ejemplares, como Fran y Eva. Aunque el ambiente que les rodeaba influyó en sus vidas -a veces muy negativamente- fueron siempre libres, nunca marionetas del destino. En un momento de sus vidas eligieron el camino equivocado -en unas ocasiones, sin darse cuenta por su edad -como a Fran y Ev a- a dónde les conducía; en otras, forzados por circunstancias terribles, como Anisa, víctima de la trata-; pero todos decidieron acoger la misericordia en su propia vida y responder a la gracia.
Conocer y conversar con estas personas me ha reconfortado profundamente; y eso me ha movido a publicarsus historias, que son, sin duda, historias fuertes. Espero que al lector le suceda lo mismo, porque cada una de ellas trae un mensaje de profunda esperanza, entretejida en el misterio del amor y la libertad.
Rafaela Santos, Presidenta del Instituto Español de Resiliencia, lo explica certeramente en su libro Levantarse y luchar: "la personalidad es dinámica y puede cambiar para bien o para mal en el tiempo, porque no todo lo bueno se conserva sin esfuerzo y lo malo puede cambiarse a voluntad. Por la misma razón, no se puede hablar de resiliencia como de algo absoluto y medible, que se tiene o no, ya que se trata de un proceso dinámico que surge de las cualidades del individuo en relación con las circunstancias de su historia vital".
ISBN
978-84944653-0-7
PVP
14,90 € (IVA incluido)
PÁGINAS
140
FORMATO
15x23cm
ENCUADERNACIÓN
Rústica con solapas
EDITORIAL
FRESHBOOK
9788494465307