Ya es un problema mundial. Más de 146 millones de páginas pornográficas son vistas al día. Eso representa más del 30 por ciento de todo el tráfico en internet según cifras de 2006. Los ingresos de la pornografía online a nivel mundial se calculan en más de 100.000 millones de dólares al año, muy por encima de los beneficios que declaran en su conjunto grandes empresas como Google, Microsoft, eBay, Appel o Netflix.
Existen más de cuatro millones de portales de temática pornográfica, y su consumo no para de crecer. La comunidad médica ya califica la adicción a la pornografía como una nueva droga tan peligrosa como el "crack". Domina la mente, el cuerpo y la voluntad, además de generar una liberación abundante de dopamina en el cerebro, algo que también sucede cuando se consume cocaína o heroína.
El libro "La pornografía online. Una nueva adicción" (Vozdepapel), escrito por Óscar Tokumura, señala la correlación entre la exposición a la pornografía y la modificación física al cerebro. Según un estudio realizado en Alemania por el Instituto Max Planck a un grupo de personas no adictas a la pornografía, se constató como esas personas experimentaban un cambio en su masa cerebral tras consumir una media de cuatro horas semanales de pornografía durante varias semanas. En concreto, la zona cerebral que normalmente se activa a causa de la dopamina y otros neurotransmisores generando excitación, se vio reducida de tamaño. Los investigadores alemanes concluyeron que ante una sobredosis de dopamina, la zona del cerebro afectada se retrae generando una reducción de masa encefálica.
Hay esperanzas para romper esa adicción
Con la voluntad no es suficiente para romper esas cadenas que esclavizan. Los expertos en esta nueva adicción señalan un primer paso fundamental: 10 días de desintoxicación en los que no puede haber caídas en el consumo de la pornografía. Ese es el periodo mínimo que establecen los médicos para que el cerebro del adicto se normalice de la sobredosis de dopamina y de otros neurotransmisores que lo estimulan. A partir de ese momento, Tokumura da unas pautas realistas para dejar atrás esta adicción que domina sobre la voluntad del consumidor y trastoca la vida.
"La pornografía online. Una nueva adicción" es un texto que ofrece esperanza a los que están enganchados a esta droga. Avalado por infinidad de estudios y terapias que han devuelto la esperanza de miles de personas, "La pornografía online. Una nueva adicción" tiene un mensaje claro: hay salida para este laberinto.
LA PORNOGRAFÍA ONLINE. Una nueva adicción.
Óscar Tokumura
VozDePapel.
Madrid, 2015.
211 páginas.
PVP: 10 €