CAMINEO.INFO -Valencia/ESPAÑA- El iniciador del Camino Neocatecumenal, Kiko Argüello, ha defendido la necesidad de fomentar nuevas formas de expresar la fe, ante la secularización de la sociedad actual, y ha propuesto "una nueva estética" para la Iglesia.
Argüello, que ha pronunciado una conferencia sobre "Evangelización y Cultura" organizada por la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia ante más de 1.500 personas en el salón de actos del Seminario de Moncada, ha destacado la importancia de transmitir la fe a las nuevas generaciones a través de la “liturgia doméstica” que desarrolla el Camino, “que tiene el número de hijos más alto de Europa”.
En Europa “faltan muchos millones de católicos” porque después de la encíclica "Humanae vitae", escrita por Pablo VI y publicada en 1968, “muchos creyeron equivocadamente que la paternidad responsable consistía en limitar los hijos a uno o dos”.
Sin embargo, "el acto conyugal es un acto sagrado y siempre tiene que estar abierto a la vida”. Por ello, Argüello ha asegurado que emplear la píldora o el preservativo “es falsearlo”.
Además, el iniciador del Camino Neocatecumental ha lamentado que en la Europa actual, "caracterizada por el elevado número de divorcios, como sucede en España", ya no se pueda predicar la familia cristiana, "sino la familia abierta, alargada, con numerosos casos de divorciados y separados”.
Por ello, ha defendido que “el Camino salva a la familia y la familia salva a la Iglesia, a la sociedad, porque es la célula fundamental de ésta”. Por el contrario, “destruir la familia es destruir la sociedad y se está llegando a un tipo de sociedad muy dura porque envejece y el Estado no llega a cubrir las necesidades de tantos ancianos que quedan solos”. Argüello ha puesto como ejemplo el testimonio de las familias misioneras que deciden dejar su país y comodidades para afrontar la tarea de evangelizar. También ha recordado cómo en el último encuentro con el Papa en Fátima participaron de más de 50.000 jóvenes del Camino.
Finalmente, Argüello, que estaba acompañado por Carmen Hernández, iniciadora también del Camino junto a él, ha animado a todos a vivir “no para sí mismos sino por quien murió por nosotros” y a “darse a los demás” ya que el egoísmo provoca “insatisfacción”.
“Si sólo importa la propia felicidad esto es una condena”, ha dicho Argüello, que ha abogado por “romper la esclavitud del propio egoísmo” .
Por su parte el arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, que ha presidido el acto desarrollado en el Salón de Actos del Seminario de Moncada, ha expresado su agradecimiento al iniciador del Camino Neocatecumenal por su “testimonio de fe” que “alienta nuestras vidas” y por mostrar la “belleza” de Jesucristo, una “belleza especial de amor que salva el mundo”.
Según el prelado, “una fe que no se hace vida o testimonio, o una fe que no deja huellas en la cultura, que no cambia la vida o la historia, es una fe malamente vivida”.
Con la disertación de Argüello ha quedado clausurado el ciclo "Dies Academicus" que se ha venido desarrollando durante los últimos meses en la universidad CEU Cardenal Herrera.
En el acto de esta tarde han participado también el capellán del CEU, José Francisco Castelló, y el rector de la universidad.
Datos biográficos
Kiko Argüello (León, 1939) inició el Camino Neocatecumenal en 1964, en Palomeras Altas, un poblado de chabolas de la periferia de Madrid. Se trasladó hasta allí “después de una crisis existencial, al descubrir en el sufrimiento de los inocentes el tremendo misterio de Cristo Crucificado, presente en los últimos de la tierra”, según fuentes del Camino. En la actualidad, el Camino cuenta con alrededor de un millón y medio de fieles en más de 120 países de los cinco continentes.
Kiko Argüello es seglar, estudió Bellas Artes en la Real Academia de San Fernando y recibió el Premio Nacional Juvenil de Pintura en 1959. Su obra pictórica está presente también en la Domus Galilea de Israel, en la Catedral de Madrid y en iglesias de Florencia, San Pedro del Pinatar y de la capital de España.