CAMINEO.INFO -Fátima/PORTUGAL- El peregrinar del Pedro por tierras portuguesas durante estos días está siendo acompañado por un séquito ingente de jóvenes del Camino Neocatecumenal procedentes de todos los rincones de Europa, que han querido sumarse a la visita de Benedicto XVI al Santuario de Fátima con motivo del décimo aniversario de la beatificación de los pastorcitos Francisco y Jacinta Marto, que junto a Lucía dos Santos fueron los primeros testigos de las apariciones de la Virgen de Fátima en 1917.
La mayor parte de peregrinos llegó ayer miércoles a Portugal, donde realizarán diversos itinerarios de evangelización para anunciar el Evangelio por las calles, y participarán en la Misa con el Santo Padre junto al lugar en el que se apareció la Virgen. Mañana viernes está previsto en el mismo lugar el encuentro vocacional con los iniciadores del Camino, los españoles Kiko Argüello y Carmen Hernández, que será presidido por el Patriarca de Lisboa, el cardenal José da Cruz Policarpo
Además el Santo Padre bendecirá en la Misa en Oporto del viernes la primera piedra del nuevo Seminario Redemptoris Mater ‘Santa Teresa del Niño Jesús’, el segundo Seminario misionero de Portugal, erigido este año a petición del Obispo, según comentó el Rector Padre Daniel Saturi a la Agencia Ecclesia.
Las 250 comunidades neocatecumenales de Portugal han preparado con esmero la acogida de los peregrinos y los eventos en los que participarán, y se ha habilitado una web oficial con información al respecto: http://www.fatima2010cnc.com/
Desde hace décadas los iniciadores del Camino han secundado y propiciado la asistencia de los jóvenes de las comunidades a los encuentros con el Papa, en un acto de adhesión incondicional a Pedro y de amor a la Iglesia, en Jornadas Mundiales de la Juventud y demás peregrinaciones. Especialmente significativos fueron la visita de Juan Pablo II a Israel en el 2000, acompañado en el Monte de las Bienaventuranzas por 50.000 jóvenes y las JMJ de Colonia de 2005, a la que asistieron 100.000 neocatecumenales de todo el mundo.