El pasado octubre, una familia de la parroquia de Santo Tomás de Villanueva de Castellón fue enviada a una Misión Ad Gentes
misión a Camboya. Ahora, un mes después de su llegada, Enrico y
Beatriz, junto a sus cuatro hijos, comparten sus primeras impresiones de
la experiencia en Siem Reap, donde viven su vocación en una realidad
mayormente budista y con una presencia cristiana muy limitada.
La familia reporta que, pese a las dificultades y el impacto
cultural, se sienten «contentos». En Siem Reap, los cristianos
representan una pequeña minoría y enfrentan restricciones en la
evangelización, sin posibilidad de invitar abiertamente a otros a la
Iglesia. La comunidad católica local es pequeña y, aunque la ciudad
recibe a numerosos turistas, muchos niños de la región viven en
condiciones de pobreza y deben mendigar para ayudar a sus familias.
Mientras sus hijos se adaptan al colegio y se integran en su nuevo
entorno, Enrico y Beatriz han comenzado a estudiar el difícil idioma
Khmer, confiando en que «poco a poco el Señor ayudará». Además,
próximamente se reunirán con el Prefecto Apostólico de Battambang, D.
Enrique Figaredo Alvargonzález S.J., para colaborar con la misión local y
compartir el camino de fe en esta desafiante pero esperanzadora Misión Ad Gentes.