«La figura de Carmen jugó un gran papel en la Iglesia postconciliar» Con estas palabras, Kiko Argüello ha reconocido la figura de Carmen Hernandez, junto a quien inició el Camino Neocatecumenal.
La BAC (Biblioteca de Autores Cristianos) ha presentado esta tarde el libro “Carmen Hernández. Notas biográficas” del autor Aquilino Cayuela. El acto se ha celebrado en el Centro Neocatecumenal. A la presentación han asistido además del autor, Aquilino Cayuela, y el postulador de la causa, Carlos Metola, el cardenal Rouco Varela. También ha estado presente el equipo internacional del Camino Neocatecumenal: Kiko Argüello, Mario Pezzi y Ascensión Romero.
El primero en tomar la palabra y presentar el acto ha sido el postulador de la causa de beatificación y canonización, Carlos Metola, afirmando que «la
biografía era algo indispensable para la causa. Han sido 5 años de
investigación y documentación y hay un trabajo muy grande detrás de
mucha gente. La BAC tuvo que sacar este libro en julio, para cuando se
pidiera formalmente la causa. A pesar de eso, es ahora cuando se hace la
presentación oficial. Yo me pregunto, ¿un libro puede presentar la vida
de una persona?, ¿se pueden englobar 50 años de vida en un libro? Qué
genialidad ha tenido Dios al unir a Kiko y Carmen, qué sabiduría tan
oportuna a los tiempos de hoy, para poder anunciar el evangelio de una
forma nueva. Para profundizar en las raíces de nuestra fe, ellos han
arquitectado una iniciación cristiana, tan urgente en esta época.
Leyendo este libro revivimos la primera parte de la vida de Carmen, que
es cuando Dios ha tenido que forjar su espíritu para este servicio a la
Iglesia. Junto con Kiko, este libro narra una historia trepidante, que
es uno de los frutos del Concilio Vaticano II que es el Camino
Neocatecumenal. El autor hace presente a Carmen a través de muchas
citas. Para muchos de nosotros leer el libro es como volver a
escucharla».
El siguiente en tomar la palabra ha sido Aquilino Cayuela,
autor del libro, que ha expuesto que «la relevancia de este libro no se
encuentra en el autor. Lo que da el valor a este libro es la persona.
Carmen fue una persona excepcional y me sorprende el intenso amor a
Jesús que tuvo toda su vida. Fue una mujer muy audaz y siempre lo
demostró. La honda vocación de servicio que tuvo. Quiero destacar que ha
sido un honor para mi hacer este libro. Fue un encargo de Kiko Argüello
y he contado con la ayuda internacional del Camino, sin su ayuda no
hubiese alcanzado a hacer este libro. Reconozco que he disfrutado estos
años de una posición privilegiada investigando sobre esto. Este libro se
adentra con cuidado y respeto en la vida de Carmen, mostrando una
reconstrucción completa de su vida, contextualizando sus etapas y
respetando sus testimonios y palabras».
En su intervención, el cardenal Rouco Varela ha
explicado que «me pidieron que escribiese un prólogo para el libro de
Carmen. Yo conocía a Carmen desde el invierno de 1995. Conocía el Camino
Neocatecumenal pero no mucho. Después de leer el libro he conocido no
solo a Carmen de manera exterior, sino también una parte más profunda.
Emerge la historia de un alma grande por su relación personal con el
Señor y su servicio a la Iglesia. La figura de Carmen en la historia de
la Iglesia contemporánea es muy importante».
Otro de los participantes que ha intervenido en el acto ha sido Kiko Argüello,
que ha afirmado que «el camino es una obra del Espíritu Santo en la
tierra. Carmen y yo henos sido testigos de la presencia de Dios. Hemos
visto que Dios existe y que crea la comunidad. Dios está vivo en su
comunidad. Dios ha hecho obras en la vida de Carmen y en la mía y nos ha
querido unir. El Señor ha hecho una larga historia de preparación con
Carmen, repasando toda su vida. En estas notas biográficas podréis
conocer los detalles de su peregrinación que serán fundamentales en su
vida y en la preparación del Camino. Carmen y yo nos conocimos en 1964,
yo me había ido a vivir a una chabola y conoció la historia de la gente
con la que yo vivía y decidió quedarse a vivir con nosotros. Su vocación
era la misión y nunca pensó quedarse en España. Dios quiso que
confluyésemos contra viento y marea. Nosotros hemos visto y tocado el
Espíritu Santo gracias al Camino».