El concebido “no es un tumor, es un hijo”, recuerda Obispo

El presidente del Episcopado afirmó que le “había entristecido y desconcertado la noticia de la retirada por parte del Gobierno del proyecto de ley de defensa del niño concebido y no nacido, y de la ayuda a la madre que se siente angustiada ante el nacimiento de su hijo en gestación”.

Por eso ha precisado que los Obispos de España “continuamos padeciendo el mismo desconcierto y reclamando lo prometido en el programa electoral”.

Además de trasmitir el mensaje y el empeño de la Iglesia de” defender siempre el valor sagrado e inviolable de la vida humana desde la concepción hasta el ocaso, y en todas las situaciones y circunstancias”, el presidente de la CEE ha subrayado la defensa dela vida de “los más débiles entre los que se encuentran los niños concebidos y no nacidos”.

Mons. Blazquez recordó las palabras de filósofo Julián Marías, en las que advertía de que “la aceptación social del aborto había sido uno de los hechos más graves de nuestro tiempo”, por eso ha precisado que los Obispos de España quieren “trabajar para que esta aceptación social se convierta en un rechazo social”.

En la lucha contra el aborto, según ha explicado el Prelado, “ayudarán sin duda las expresiones sociales que canalicen las convicciones de los ciudadanos que quieren construir de manera plenamente democrática una sociedad justa y libre en la que la vida humana sea protegida en todas sus etapas”.

“Sin abortos provocados, la sociedad será moralmente mucho más limpia. Nadie tiene el derecho a decidir a quién se deja nacer y a quién se le corta el paso”, afirmo en el discurso y ha manifestado que “los cristianos, junto con otras muchas personas, queremos que la persona nunca sea considerada como medio, sino como fin, que es una expresión del reconocimiento de su dignidad”, ha manifestado.

Además Mons. Blázquez ha subrayado, en nombre de los Obispos españoles, que tienen “confianza en la acción de la Justicia”.