Los Obispos de Estados Unidos reiteraron su dolor y cercanía a la
comunidad judía por el atentado perpetrado en una sinagoga en
Pittsburgh, Pensilvania, y aseguraron que “el antisemitismo debe ser
condenado y debe ser enfrentado por nuestra nación".
En un comunicado firmado por el presidente del Comité para el Ecumenismo
y Asuntos Interreligiosos de la Conferencia de Obispos Católicos de
Estados Unidos (USCCB), Mons. Joseph Bambera el 28 de octubre, los
obispos recordaron que en “la mañana de ayer, la muerte y la violencia
entraron en una casa de culto”.
“El ataque contra la Sinagoga Tree of Life (Árbol de Vida) en Squirrel
Hill, Pittsburgh, es un acto cobarde y debe ser condenado por todos los
estadounidenses”.
En la mañana del 27 de octubre un sujeto armado ingresó a la sinagoga y
abrió fuego, gritando “todos los judíos deben morir”. Al intentar huir,
disparó también contra autoridades policiales, dejando un saldo de 11
fallecidos y varios heridos.
Finalmente, el atacante, un hombre de 46 años, fue puesto bajo custodia policial.
Para los obispos estadounidenses, “esos asesinados y heridos representan
lo mejor de quiénes somos: personas de fe reunidas para orar y celebrar
el nacimiento de un niño y policías respondiendo a la violencia sin
preocuparse por su propia seguridad”.
“El Comité para el Ecumenismo y Asuntos Interreligiosos de la
Conferencia de Obispos Católicos está con nuestros hermanos y hermanas
judíos durante este tiempo de gran dolor”.
“Que Dios les conceda la paz a los muertos, curación a los heridos y
consuelo a las familias de aquellos heridos y asesinados y a toda la
comunidad judía”, expresaron los obispos.