El Santo Padre ha escrito una carta sobre la fe. “Porta fidei”, en la que invita a los cristianos a redescubrir el valor de sus creencias. Con esta convocatoria, el Papa quiere enardecer la fe de todos los creyentes, especialmente la de los laicos. El objetivo es, en palabras del Papa, dar un renovado impulso a la misión de la Iglesia, para conducir a los hombres lejos del desierto en el que a menudo se encuentran sus vidas.
Cuando en una sociedad nos desayunamos a diario con asesinatos de niños por parte de sus padres, de mujeres asesinadas por sus parejas, jóvenes que son capaces de violar, matar y/o simplemente por una discusión apuñalar a otro.
Estamos siendo capaces de sustituir los viejos valores religiosos que actuaban como muro de contención moral de la violencia, por esa “ética laica” de la que tantos hablan y nadie acaba de concretar, estamos destruyendo los valores de la persona.
Por, eso Benedicto XVI, quiere enardecer la fe de todos los creyentes, especialmente la de los laicos, y llamarlos a la acción y al testimonio público, incluso en las circunstancias más adversas.