Pese a los fallos en la organización y la logística, la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Río de Janeiro ha sido un rotundo éxito. Más de 3,5 millones de personas asistieron a la misa de clausura, que presidió el Papa Francisco el domingo en la playa de Copacabana, según informó ayer el Ayuntamiento de la ciudad carioca.
Además, la ciudad del Cristo del Corcovado batió un récord de afluencia de turistas durante la visita del Santo Padre a Brasil. El Ministerio de Turismo calcula que dos millones de visitantes pasearon estos días por Río, lo que supuso unos ingresos de 387,6 millones de euros.
Ningún evento celebrado hasta el momento había logrado reunir en una sola ciudad esta cifra de turistas, revela un estudio de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) realizado a petición del Ministerio de Turismo.
Las cifras de un éxito
3,5 millones de jóvenes asistieron a la misa de clausura de la JMJ en Copacabana, que fue presidida por el Papa, según dastos del Ayuntamiento de Río de Janeiro.
387,6 millones de euros ha dejado el récord de afluencia de turistas estos días en Brasil con motivo de la JMJ.
72,7% de los turistas que visitaron Río de Janeiro estos días lo hacían por primera vez y uno de cada cuatro era extranjero.
7% de los peregrinos se alojó en hoteles y el 55%, en casas de voluntarios y parroquias y el resto (63%) en albergues.
